A pesar de haber diversos puestos de controles de fuerzas de seguridad como Gendarmería y Policías Federal y Provincia en distintos puntos de la ciudad. Se notó mayor presencia de gente en la vía pública por pago de haberes a jubilados, asignaciones universales por hijo, entrega de bolsones Paicor en escuelas, por la mañana.
En la tarde del viernes era infernal el movimiento vehicular por todos los sectores de la ciudad, se entiende que muchos vecinos deben realizar compras de alimentos o medicamentos, pero la sorpresa fue cerca del atardecer cuando policía federal y gendarmería cerraron las calles laterales del centro de Bell Ville y se produjo un embotellamiento de tránsito en la arteria principal con demoras de hasta una hora para pasar el corto circuito del centro bellvillense.
Son numerosos los comunicados diarios de Defensa Civil con las recomendaciones para dar cumplimiento a las disposiciones emanadas desde el gobierno central con el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, pero parece algunos bellvillenses no lo llegaron a entender todavía.
En uno de los diversos controles la Policia Federal secuestro el primer automóvil por no saber justificar con motivos reales el desplazamiento por la ciudad, medida que tiende a endurecerse con el paso de los días.
Las autoridades del Juzgado Federal de Bell Ville hacen un llamado a la colaboración de la población, para que no ocurra más el suceso de la tarde noche del viernes en la calle Córdoba, colmada de automóviles que ocupan varias cuadras de largo, violando el aislamiento impuesto por el gobierno nacional.
Por último, llamar a la reflexión a la sociedad con las palabras del Papa Francisco en la misa histórica del viernes, ante una plaza San Pedro vacìa, “nadie se salva solo» de la crisis mundial generada por el avance del coronavirus, «nos dimos cuenta de que estábamos en la misma barca, todos frágiles y desorientados».
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